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La Terapia Gestalt enseña, a través de la toma de conciencia, a deshacer los mecanismos interiores que nos empujan a conductas repetitivas e ineficaces para solucionar los problemas que se nos presentan. Es en la repetición de patrones inconscientes donde se encuentra el orígen de nuestras frustraciones; con la Terapia Gestalt nos hacemos más conscientes de lo que hacemos, de este modo, vamos desarrollando la habilidad para aceptarnos y para experimentar el "aquí y ahora" sin tanta interferencia de las respuestas fijadas del pasado. Con Terapia Gestalt podrás superar los conflictos y dificultades, mejorando la relaciones contigo mismo y con los otros y aumentando tu calidad de vida. La Psicoterapia Gestalt te ayuda a superar estados de Ansiedad, Depresión, Dependencia emocional, Baja Autoestima, Problemas de Pareja. Te permite conocerte mejor a ti mismo y encontrar nuevas herramientas con las que resolver las dificultades con tu familia, relaciones, pareja, amigos, trabajo, y todo lo que te está impidiendo disfrutar de tu vida, y así sentirte mas pleno, motivado y feliz.

jueves, 12 de marzo de 2015

¿Por qué aparece el miedo?



El miedo es una reacción de tu cuerpo ante una sensación de peligro. No es una sensación mala, todo lo contrario, tu cuerpo te está avisando que algo es diferente a lo normal o que hay una potencial amenaza cercana. Que lo percibas es muy bueno, especialmente si esta amenaza es real.
Ya que lo percibes y que tu cuerpo te avisa de la nueva situación, debes escucharlo, pero no paralizarte. Es cierto que tienes un montón de sensaciones físicas nuevas y desagradables, pero debes concentrarte en el momento, tratar de ver más allá y entrar en acción.
Podemos clasificarlo en miedo saludable y miedo no saludable. El miedo no saludable es el que te paraliza, no te permite avanzar y te deja estático. Es el miedo que produce la indefensión y el abandono, cuando la persona piensa o siente que no puede hacer nada para enfrentarse a la amenaza que ha percibido.
Esa es la clase que debes combatir y transformarlo en un miedo saludable. Este segundo te mantiene alerta, con precaución. Te advierte de nuevas situaciones pero te deja moverte y avanzar. Es más, en muchos casos hace que vayas más allá -en un sentido positivo- de donde pensabas que se encontraban tus propios límites.
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Autor: Okairy Zúñiga 

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